Thursday, April 3, 2008

Autobiografía mínima

A mediados de mayo de 1979, mi pequeño ser experimentó por primera vez la dicha de la respiración aeróbica; mediaba también el sexenio de José López Portillo y el matrimonio Estrada Cruz recibía su tercer vástago, producto del cuarto embarazo de Martha Beatriz a quien por fines prácticos en adelante se le conocerá con el sobrenombre de "mi mamá"; y no es que importe pero aquel lejano día era un sábado; la ciudad: Puebla.
Dos años después, la familia se trasladaría al entonces DF donde fincaría su residencia. Corría 1985 cuando el pequeño Luis inició el recorrido pedagógico que resultaría en la inamovible decisión de estudiar comunicación.
Así en 1997, entre la consabida duda existencial de la adolescencia ingresé en la UNAM, para cinco años más tarde y con muchísimas más interrogantes integrarme al campo laboral. La desesperanza hizo mella en mí y, como el poeta que se vuelve burócrata, enfoqué mis esfuerzos al ingrato y antiquísimo arte del servicio a clientes.
He de decir que no me fue mal, en un par de años escalé posiciones hasta un mando intermedio pero mis pensamientos anti-imperialistas aunados a la excesiva workload inclinaron la balanza hacia otro camino. Lástima que el desempleo no es una actividad por sí mismo.
Pronto dirigí mi destino hacia las desconocidas mieles de la cobranza telefónica, y entre mentada y mentada "mi mamá" se empezó a deslavar. Exhausto y fracasado como la tripulación del capitán Scott (Evans, Wilson, Bowers y Oates), elegí la quiebra financiera sobre la incomodidad ética.
Un giro del destino me llevó a MVS Televisión, donde desde hace poco más de un año estoy apretando botoncitos, un trabajo que sí bien está relacionado con mi perfil profesional no me ha brindado la satisfacción y paz mental largamente anhelada.
El día de hoy, en el intento de afinar la escritura y acallar mis demonios, inicio este blog donde te enterarás de mis frustraciones, fobias y neurosis pero también de mis convicciones, mis sueños, complejos y todo aquello
que hace que nuestra vida no se pueda resumir a dos hojas de un plano currículum. Be my guest.